Emprender en la piel de otro
Cuando tu trabajo te apasiona y también te apasiona ser parte de una empresa naciente, parece que el mejor camino es ser business angel, sobre todo si puedes implicarte como mentor.
La mayoría de los business angels e inversores lo que quieren es rentabilizar sus inversiones. Yo soy un poco más raro y aunque también lo quiero, mi prioridad es ilusionarme y participar en un proyecto naciente, por eso mis “tickets” son siempre muy pequeños.
Recuerdo como empecé en este mundillo: estaba en un Iniciador escuchando a Iñaki Arrola, cuando comentó como estaba creando una fondo con otros business angels para invertir de forma conjunta, con una implicación personal en proyectos en fase semilla, con foco en el emprendedor y con una filosofía diferente. La idea me enganchó desde el primero momento, de tal manera que poco tiempo después estaba junto a él, Rafa Garrido y otras personas en el notario firmando la constitución de Vitamina K.
En Vitamina hemos invertido en empresas como Chicisimo, The Mad Video, Alice, Otogami, Promociones Farma, Carto DB, Sin Delantal, Saluspot y otras tantas. Estas inversiones son las que más seguridad me producen porque sé que están elegidas y acompañadas por personas extraordinarias.
Además de participar de forma agrupada, tengo también mis pequeñas inversiones personales en empresas como Bultaco, Hoppin, Mox, Food in the Box o La Mas Mona.
Mi última forma de estar involucrado en las empresas de otros emprendedores es participando como advisor o miembro del consejo. Curiosamente José Lourido de Topdesti me ha pedido que entre en el consejo de su startup y parece que se cierra un círculo: empecé como emprendedor en Turismo y muchos años después voy a ayudar a una startup alucinante del mismo sector. Verdaderamente me hace ilusión.
* La foto de arriba es de una vez que navegaba por Baleares con mi mujer y unos emprendedores. La he puesto porque si no te cuento nada, parece que el barco es mío y que estoy tan forrado, que puedo ser el inversor de los grandes «tickets» al que hay que llamar.